Bonita, sin ninguna duda, la boda de Jesús y Araceli. En otro día caluroso, típico de este verano que estamos disfrutando... o sufriendo, según se mire, nos pusimos en marcha como siempre, con ganas e intención de dejar a esta pareja el recuerdo que ellos esperaban y por lo que han confiado en nuestro trabajo en este día tan importante. Nervioso estaba Jesús pero siempre atento a que no se escapara ni un detalle. Más tranquila estaba Araceli, o eso parecía….pero algo nos decía que no, que esos nervios estaban por dentro pero que ella los contenía con gran habilidad….
Íntima y entrañable fue la ceremonia delante de Nuestro Padre en nuestra querida Capillita en la que se dieron ese “sí, quiero” que llevaban tantos años esperando…..
La noche transcurrió llena de emociones en el marco incomparable de Jardines Aguanevada en el que las noches de boda se tornan en noches mágicas y donde nuestros protagonistas disfrutaron junto a sus seres más queridos de uno de los días más importantes de sus vidas. Gracias a todos los que os preocupasteis por hacernos más sencillo nuestro cometido y esperamos haber estado a la altura de este día tan maravilloso.